Efectivamente, es la penúltima semana de esta gran aventura. Eso quiere decir que si todo sale según los planes, la semana que viene saldré de este piso y la siguiente os escribiré el último post de mi aventura… diciendo que ya estoy en España. Quedarán cosas pendientes, sin duda, pero poco a poco me iré instalando.
La semana pasada fue extremadamente complicada, porque yo no tenía en mi cabeza la idea de que irse del laboratorio fuese a ser tan difícil emocionalmente. Mis compañeros son personas maravillosas y la verdad es que no me esperaba recibir tantísimo cariño de ellos. Pero este es un paso importante en mi vida, y no podía simplemente dejarme llevar por la rutina. Me lo pusieron muy difícil, pero finalmente el viernes dejé el laboratorio y colgué mis pipetas.
Lo que hice
- Hice un montón de copias de cosas y todo eso, pero seguro que se me han olvidado papeles que descubriré esta semana.
- Conseguí entregar mis llaves, y entre el depósito y otras cosas ahora tengo más dinero en efectivo del que querría.
- He empaquetado en la medida de lo posible el despacho y el baño. Pero claro… es que hay cosas que todavía me hacen falta!
- No me he relajado una mierda, al contrario. Esto no ha sido fácil
- He vendido un par de cosillas más, así que cada vez quedan menos muebles
Lo que tengo que hacer
- Esta semana toca finalmente cancelar el permiso de residencia
- Tengo que acordar la entrega de llaves con los caseros
- También me toca enviar el papel de salida a todas las empresas que me lo requieren para cancelar mis contratos
- Quiero intentar vender el sofá el finde, ojalá sea posible porque me quitaría un gran peso de encima (literal)
- Tengo que respirar, porque la semana siguiente vamos a tener mucha tensión
Por suerte, si todo sale bien, a partir del jueves ya no estaré sola. Y eso me va a ayudar mucho. Ojalá salga todo bien…
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