Pasa enero…

Pasa enero y yo que aún pienso que estoy en navidades. Y sí, realmente pienso que estoy en navidades… porque en las placas de cultivo sigo poniendo que es día XX-12-08.  Es chungo…

Por otra parte, como creo que todavía estamos en navidades, sigo intentando organizarme el año… a este ritmo va a ser julio y seguiré en proceso de organización.

Ya sólo me quedan dos semanas para empezar con los cursos de doctorado del diablo otra vez, y en el laboratorio tengo demasiadas cosas pendientes… nunca creí que me enganchase tanto esta cosa! Además intento dedicarle un poquito de tiempo a mi vida fuera del laboratorio y eso se está convirtiendo en algo muy pero que muy complicado… estoy empezando a valorar la clonación como método factible, aunque también dejar de dormir o parar el tiempo… quién fuese como Hiro!!

Mis progresos de lectura van más bien mal. Mi buen comienzo del año se ha visto interrumpido por una gran pila de artículos pendientes de lectura que han desplazado otra vez el gran tocho de las Crónicas de la Dragonlance a un segundo plano. Creo que en mi vida acabaré de leer el dichoso libro. Me estoy temiendo que esto va a ser como la lectura de Añoranzas y Pesares… Para quien no conozca la historia, de modo resumido: yo tenía un novio que me dejó el tomo 1, 2 y 3. Cuando estaba a mitad del 3, cortamos… y tuve que devolverle su libro. Después, yo tenía otro novio, y como soy tan idiota que quise leerlo todo otra vez, un colega suyo me dejó el 1 y 2, y a mitad del 2 corté con mi novio, y tuve que devolverle el libro a su amigo, que a todo esto se enfadó conmigo. Ahora poseo los 4 tomos en mi estantería, pero me da un poco de mal rollo empezar a leerlo… que le tengo cariño a mi actual novio 🙂

Los últimos dos días, para quien viva en un universo paralelo, parece ser que está habiendo un temporal acojonante por Galicia. En mi casa hubo unos 60 cortes de luz (contados por el SAI), pero ninguno demasiado largo. Por el contrario, la minina estuvo unas 15 horas sin luz… pobrecilla (y más pobrecilla la minina jr, a la que le tendremos que buscar en breves un nick, teníais que escucharle la voz de agobio buscándonos cuando se iba la luz…).

Lo que está claro es que hace mucho viento. Ahora ya no tanto, pero el viernes por la noche hacía mucho. Yo fui una de esas inconscientes que cogió el coche y se fue por ahí (concretamente a casa de la minina, a cenar a oscuras). Mi casa no ha volado, y el edificio de al lado todavía no nos ha aplastado. Parece ser que en el campus un árbol aplastó un coche en una zona en la que yo aparcaba antes de ser una de las privilegiadas con tarjeta de aparcamiento 🙂

Por otra parte, el trabajo últimamente va bien… obtuve cristalitos de mi proteína. Son muy bonitos!! Os los enseñaría… pero no veríais nada… y además tendría que mataros…