Moneras y bacterias: parecido pero no lo mismo

Una frase que estoy leyendo mucho últimamente para criticar a los que van hablando por ahí de virus con teorías locas es que se vienen arriba y opinan basándose en unos datos incompletos cuando ni siquiera diferencian una bacteria de un virus. Y concretamente esa afirmación, me resulta un poco molesta. Porque aunque ahora parezca que todo el mundo tiene muy claro qué es un virus, mis experiencias pasadas me indican que hace no muchos años algunos de los ahora “expertos” no tenían muy claro qué era un virus. Es más, alguno de los expertos más televisivos ni siquiera tenía claro qué tipos de “espículas” pueden tener los virus. Pero yo no venía a hablar de eso. Yo venía a decir que las bacterias no son moneras.

Y es que mucho hablar y mucho experto, pero aquí parece que seguimos sin tener claro eso de que los cinco reinos no son así. Porque lo de hablar de moneras ha quedado un poco en el pasado, pero no sé qué es peor, porque ahora parece que se llama bacteria a todo lo que antes era monera y ya está. Y no, los moneras no son necesariamente bacterias… en el concepto actual de bacterias.

Qué eran los moneras

Se trataba de uno de los cinco reinos cuando los seres vivos se clasificaban erróneamente. Como ya he contado alguna vez. la clasificación quedó anticuada mucho antes de que la mayor parte de los que me leen llegasen al instituto en el que seguro les dijeron que había cinco reinos. Y a cada año que pasa vamos a peor, porque a los niños se les sigue hablando de cinco reinos.

En ese momento, los moneras incluían a todos los organismos que no tenían núcleo celular. Previamente, se había descrito primero a los moneras como cualquier organismo “muy simple” incluyendo tanto a procariotas, como a algunos eucariotas unicelulares. Según se avanzó en el conocimiento, primero se quitaron los eucariotas que sobraban y después se incluyeron aquellos procariotas que estaban en otros grupos, acabando como un reino que agrupaba a todos los procariotas. Recordemos que los procariotas son seres vivos sin núcleo celular y los eucariotas los que lo tienen.

Las verdaderas bacterias

El caso es que aunque en ese momento se llegó a lo de moneras = procariotas = bacterias, la última parte es incorrecta. Porque las bacterias no tienen núcleo, pero las arqueas tampoco. Para salir del paso, podemos recordar que a las arqueas se las denominó mucho tiempo arqueobacterias, y a las bacterias eubacterias. Así, aunque ahora llamamos bacteria solo a las eubacterias (bacteria verdadera), muchos todavía consideran que las arqueas son un tipo de bacteria… ¡Porque son arqueobacterias!

Nada más lejos de la realidad. En sí, bacterias y arqueas se encuentran en dominios diferentes, siendo el tercero el que abarca a los seres eucariotas. Entre los eucariotas tenemos a los otros reinos: animales, plantas, hongos y protistas. No parece muy lógico que un dominio se divida en cuatro reinos y los otros dos sean abarcados por un quinto. Y es que insisto, una arquea oceánica se parece a un lactobacilo mucho menos de lo que el bacilo se parece a un hepatocito humano, o ya puestos a un humano entero.

Dibujo de un árbol en blanco y negro
Lo del árbol de la vida… “es complicado”

Moneras vs. bacterias

Está claro que nuestra perspectiva nos puede, y según las cosas son más diferentes de nosotros, menos vemos sus diferencias. Pero cuando normalizamos y lo miramos con una perspectiva neutra, pues se parecen más. Nos pasa incluso con otros animales… en humanos tenemos una obsesión histórica con intentar ver diferencias incluso cuando no las hay, en otros primates todavía vemos bastantes, pero si nos ponemos a mirar roedores de repente son todos iguales a nuestros ojos.

Esa perspectiva humana es la que nos hace olvidar muchas veces algo que nos han explicado más de una vez, porque seguro que a todos os habían contado, ya que los reinos como tal estaban desfasados. Y así acabamos llamando bacteria a todo lo que sea pequeño, como sinónimo de monera, porque en nuestra cabeza está grabado aquello de que los moneras son los procariotas. Y ya está, del resto nos olvidamos.

Cuidado con presumir de más

Se me ocurrió venir a aclarar que no todos los moneras o procariotas son bacterias y que las arqueas son otro dominio tras una sucesión de tweets. Porque en un mismo timeline se usaba esa frase de desprecio hacia los que “hasta ayer no sabían diferenciar una bacteria de un virus” y poco después se hablaba de un hallazgo en el que había bacterias implicadas… con el pequeño detalle de que no había bacterias, había arqueas. Y es que creo que somos nosotros los primeros que tenemos que llamar a las cosas por su nombre, porque en 40 años ya nos va tocando enseñar al resto que esos microorganismos se llaman arqueas.

Tras mis quejas sobre ello, alguien me dijo que es una simplificación, que así “la gente” lo entiende mejor. Pero vamos a ver… ¿Simplificaríamos llamando bacteria a un virus? No, pues tampoco mezclemos lo otro. Que sí, que habrá que explicarlo muchas veces hasta que borremos las ideas erróneas que les han enseñado desde pequeños, pero si seguimos repitiendo el mismo error, no podemos extrañarnos de que haya gente que tampoco tenga claras las diferencias entre bacterias y virus.

Y acabo el rollo, pero aprovecho para recordar que aunque este tipo de aclaraciones más de nomenclatura, más técnicas, puedan parecer evidentes a muchos, resuelven muchas dudas a otros. Incluso a algunos que creen saber. Por eso también animo a que me pidáis aclaraciones de lo que sea que genere dudas. En algunos casos seguro que yo también me sorprendo si empiezo a buscar info sobre el tema. Por ejemplo, yo hoy he descubierto que según la RAE, mónera y monera no significan exactamente lo mismo… ¿Lo sabías?

Antes de irte lo te olvides de compartir esta entrada. También puedes mantenerte al día y apoyarme suscribiéndote a mi newsletter. Hay otras formas de apoyar mi proyecto, como por ejemplo con un café:


Publicado

en

por

Etiquetas:

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *