El libro me miraba… y no he podido evitarlo. He empezado a leerlo. Es una historia que ya conozco, sé lo que va a pasar (al menos en parte) y aún así me he enganchado. Engancharse a un libro de 1500 páginas que sabes como acaba es algo jodido… porque mientras lees tienes la sensación de culpabilidad de “yo debería estar haciendo otra cosa más productiva…”.
He leido muy poquito, tan sólo unas pocas páginas (hora y media¿? qué rápido pasa el tiempo). De repente me han entrado unas ganas tremendas de:
- Releerme media biblioteca
- Comprarme libros, más libros. Muchos, muchos libros.
- Alquilar un piso para trasladar todos los libros allí y que dejen de acosarme en cada esquina… o mudarme a un piso más grande donde pueda tener una (seamos realistas, 3) habitaciones para los libros.
- Jugar!!!!! Rol! Rol! Rol! Mataaaaaar!!!
- Instalar el Diablo II y jugar!!!! (por enésima vez). Espero que el Diablo III salga antes de que me vuelva loca.
- Ir por la vida matando goblins…
En este último deseo, tengo que aclarame a mi misma que goblin y gremlin no siempre son lo mismo (aunque puedan llegar a ser igual de repugnantes), no vaya a ser que mate al bicho incorrecto…
Deja una respuesta Cancelar la respuesta