No he aguantado y me ha dado el ataque de agobio. Tengo demasiadas cosas pendientes… y no puedo con todo. ¿La solución? La de siempre. Chute extra grande de cafeína y rezar porque siga funcionando como siempre. Me pasaré unos cuantos días muy muy agobiada (por lo que no me veréis el pelo, y ya sé que últimamente no es que se me vea mucho), y después seguiré agobiada, pero habré llegado a una situación de equilibrio estable entre el agobio y las situaciones de relax…. ya sabéis, alcanzaré el Ôhm…
Si es que lo digo siempre… yo controlo 🙂
Deja una respuesta